Chacchobén, el asentamiento maya más grande al sur de Quintana Roo, se compone de pequeñas aldeas que florecieron alrededor del año 300 a.C.
Al explorar la Zona Arqueológica de Chacchobén, te maravillarás con el Gran Basamento, enclavado en la densa selva. Este basamento es una pirámide escalonada que fue el centro de actividades religiosas y públicas. En una de las escalinatas que lleva al basamento se erige el Monumento 1, un marcador de fechas calendáricas relacionadas con los equinoccios y solsticios, probablemente indicando el inicio de los períodos agrícolas.
En el extremo sur del sitio arqueológico se encuentra el Templo de las Vasijas. Aquí, podrás observar restos de estructuras que formaban parte de una zona residencial, así como diversos objetos como platos, cántaros y cuencos.
Además de los vestigios arqueológicos, Chacchobén es un excelente lugar para avistar tucanes y aves canoras. Los senderos están rodeados de zapotes, higueras, pimientas, cedros blancos y caobas, creando un entorno natural fascinante.
Desde Mahahual, la Zona Arqueológica de Chacchobén se encuentra a solo 50 minutos de distancia.