Hace más de 10 mil años, Baja California fue habitada por tribus de cazadores, recolectores y agricultores como la etnia kumiai. Estos grupos se establecieron desde el pueblo de Santo Tomás hasta las costas de San Diego, California. Como legado de su presencia en tierras mexicanas, dejaron un conjunto de 18 pinturas rupestres que conforman el sitio arqueológico El Vallecito, ubicado en La Rumorosa.
El sitio aún está rodeado por bosques de pinos piñoneros que eran aprovechados por los indios kumiai durante el verano. El fruto era considerado sagrado para esta tribu, y como evidencia de ello, se encuentran rituales plasmados en las cuevas y rocas de El Vallecito. Además, se puede observar que utilizaban el arte rupestre para marcar la fecha del solsticio de invierno y así guiar su migración para escapar de las intensas nevadas.
Seis conjuntos de pinturas y petrograbados están abiertos al público, accesibles a través de un sendero temático de dos kilómetros. Para complementar la visita, existe un museo de sitio que exhibe restos de antiguos fogones y fragmentos de cerámica encontrados durante las excavaciones en la zona arqueológica.
El Vallecito se encuentra en el kilómetro 73.5 de La Rumorosa en dirección norte. Cuenta con área de campamento y estacionamiento para recibir a los visitantes.
